El periódico “Middle East Eye” publicó un artículo del escritor británico David Hearst, en el que arroja luz sobre las verdaderas razones que llevaron a Mohammed bin Salman, el príncipe heredero saudí, a concluir un acuerdo de reconciliación con Qatar. En su artículo traducido por Libertad y Justicia, Hearst dijo que Mohammed bin Salman podría aprovechar el gran avance en la crisis con Qatar para lograr dos objetivos, el primero es anunciar su reconocimiento a Israel, y persuadir a su padre para que abdica del trono. , agregando que el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman tardó tres años y seis meses en llegar a la misma conclusión a la que algunos de nosotros llegamos después de días del bloqueo impuesto a Qatar: que estaba condenado al fracaso.
Hearst agregó que el proyecto para silenciar la voz de un vecino independiente estaba condenado al fracaso en el momento en que el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, y el entonces secretario de Estado Rex Tillerson, un ex petrolero con amplios vínculos con Qatar, se enteraron de los planes para invadir el país. península e inmediatamente la detuvo. A medida que pasaban las semanas, Qatar estaba apretando las riendas, las fuerzas turcas llegaron a Doha para formar una barrera física e Irán le dio a Qatar el derecho a usar su espacio aéreo. El bloqueo nunca podría tener éxito con un puente aéreo que se estableció alrededor del Reino de Arabia Saudita.
Explicó que Qatar solo tardó meses en armar un gran proceso de presión en Washington, que anula o revierte la influencia del principal lobby de los saudíes, el embajador emiratí Yusef Al-Otaiba, y establece un fuerte apoyo por su cuenta, por lo que el presidente estadounidense Donald Trump no admitió que Qatar albergaba la base aérea del Pentágono A más importante de la zona (Al-Udeid), cuando tuiteó su acuerdo con el bloqueo en 2017.
Al final, el príncipe saudí sobreestimó la influencia de Trump y subestimó la fuerza residual del ejército estadounidense. Tanto Tillerson como Matthew se habían ido hacía mucho tiempo, pero la presión para revertir este loco acto de imprudencia nunca vaciló. Solo creció con el tiempo.
Hearst señaló que con la inminente llegada de un presidente estadounidense hostil (Joe Biden), bin Salman sintió que había llegado el momento de poner fin a su locura, y hoy, ninguna de las 13 demandas que habían planteado los países que imponer restricciones a Qatar se han cumplido y el alojamiento no ha cambiado. La Hermandad Musulmana y su política exterior, la isla no se ha cerrado, y la alianza de Qatar con Irán y Turquía se ha fortalecido, en todo caso.
A nivel nacional, el emir de Qatar, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, está recibiendo más respeto por su defensa del estado que antes, con el auge del nacionalismo de Qatar, y Qatar se ha vuelto más autosuficiente y confiado que fue antes del bloqueo.
Qatar ganó
Este impacto desagradable ha fortalecido a Qatar, y lo mismo ocurre con la política exterior turca e iraní. Abdul Khaleq Abdullah, profesor de política en Dubai que fue uno de los defensores más prominentes del bloqueo hace tres años, dijo al Financial Times: “Se podría decir que Qatar ganó”, el costo de la lucha fue demasiado alto: hay un percepción ahora de que se trata de la oveja negra. Para la familia y solo tenemos que preguntarles, y estos fueron los peores tres años y medio en la historia del Consejo de Cooperación del Golfo. “
Pero estas conclusiones son, en el momento actual, las conclusiones de “Bin Salman” solamente, y es interesante notar quién estuvo ausente de la muestra de amor fraternal en la cumbre del Consejo de Cooperación del Golfo el martes pasado, y el fracaso de Abu Dhabi Crown El príncipe Mohammed bin Zayed acompañó la ausencia del rey de Bahréin. Hamad y Abdel Fattah Al-Sisi.
Bahrein está siendo testigo de una amarga disputa fronteriza con Qatar, y las autoridades golpistas siguen siendo escépticas sobre todo el proyecto. Mada Masr citó a fuentes del gobierno golpista diciendo que El Cairo no ve una base lo suficientemente sólida para abrir una nueva página en las relaciones con Doha, y afirman que Qatar sigue apoyando “una campaña sistemática dirigida contra el régimen egipcio”.
Las fuentes indicaron que ninguna de las demandas básicas de Qatar (cerrar Al Jazeera, cerrar una base militar turca, cortar los lazos con los Hermanos Musulmanes y limitar los lazos con Irán) no se ha cumplido. Es demasiado pronto para decir si esto indica una ruptura de las fuerzas antirrevolucionarias que se han mantenido unidas desde que ella pagó el precio por Sisi a Egipto y lo instaló como presidente de Egipto después de un golpe militar en 2013.
Tensiones por Yemen e Israel
Ciertamente, hay razones para el desacuerdo entre el líder supremo bin Zayed y su amigo cercano Bin Salman, y una es Yemen: ¿quién es realmente responsable de la coalición liderada por Arabia Saudita que bin Salman lanzó en marzo de 2015: los saudíes o los emiratíes? Las milicias financiadas y leales a los Emiratos Árabes Unidos tomaron el control del sur, dejando a los saudíes con una guerra sin resolver con los hutíes en el norte.
La segunda fuente de tensión es Israel, y al liderar el proceso de normalización con Israel, los emiratíes se han declarado claramente como el principal socio del Golfo de Tel Aviv, y provocó el alarde de Otaiba de que los Emiratos Árabes Unidos e Israel tienen las fuerzas militares más capaces. en la región.
En el primer artículo de opinión escrito por un diplomático del Golfo para un periódico israelí, Otaiba se jactó ante la ocurrencia de la normalización el año pasado, diciendo: “Con los dos ejércitos más capaces de la región, preocupaciones comunes sobre el terrorismo y la agresión, y un profundo y largo La relación con los Estados Unidos, los Emiratos Árabes Unidos e Israel puede formar una cooperación de seguridad. Más cercano, más efectivo y como las dos economías más avanzadas y diversificadas de la región, la expansión de los lazos comerciales y financieros puede acelerar el crecimiento y la estabilidad en el Medio Oriente. “
La afirmación de los emiratíes de ser el principal socio de Israel podría causar problemas al futuro monarca saudí. El actual rey del país, Salman, fue el otro destacado ausente de la cumbre del CCG.
Además de lanzar una grandeza al próximo presidente de Estados Unidos, bin Salman también puede alimentar sus oscuras razones para hacer las paces con Qatar. Sabe que al hacerlo comprará, aunque sea temporalmente, el relativo silencio de los medios controlados por Qatar, encabezados por Al-Jazeera Al-Arabia, que tiene el mayor número de audiencias del mundo árabe.
El reino se dividió
La menguante cobertura de Al-Jazeera sobre los tumultuosos acontecimientos que sacudieron al mundo árabe se ha desvanecido, e incluso antes del bloqueo, no se dedicaba, por ejemplo, la misma atención al mortífero bombardeo de Yemen por aviones de combate sauditas que a los egipcios. revolución en 2011.
Si bien los productores y corresponsales son más libres para informar que la mayoría de sus contemporáneos en los medios dominados por Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos y Egipto, Qatar aún controla el volumen de la voz. Hay muchos ejemplos, incluida la decisión de restar importancia al juicio de Loujain Al-Hathloul, un destacado activista saudí que recientemente fue condenado a cinco años y ocho meses de prisión.
Mohammed bin Salman puede aprovechar esta distensión con Qatar para lograr dos objetivos: anunciar su reconocimiento a Israel y persuadir a su padre de que abdica del trono y le ceda la corona. No hay duda de que bin Salman cree que ha llegado el momento de hacer los dos juntos, desde el comienzo de su campaña electoral para convertirse en rey, establecer estrechas relaciones secretas con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, fue la clave para la relación de bin Salman con el presidente estadounidense. asesor Jared Kushner y suegro Trump.
El reino está dividido de arriba a abajo sobre el tema de la normalización con Israel, y el peso de la política exterior en la familia continúa expresando públicamente su oposición, especialmente el exjefe de inteligencia saudí, el príncipe Turki Al-Faisal, así como el propio rey. , con quien el Príncipe Turki todavía es cercano, y será Este tema tiene un fuerte impacto en el pueblo saudí.
Disturbios futuros
Uno de los pasos importantes para resolver este problema es neutralizar o reducir el volumen de medios árabes que podrían contradecir a bin Salman y esto proviene principalmente de Qatar, lo que puede explicar por qué el propio Kushner asistió a la cumbre de países del Consejo de Cooperación del Golfo.
A pesar de todo el dolor involucrado, el premio es grandioso, y Biden, un sionista comprometido, lo agradecería. Entregar Arabia Saudita en manos de Israel representaría un verdadero premio para la coalición que se está construyendo por encima y alrededor de las cabezas de los palestinos. Arabia Saudita, en su tamaño y riqueza, sigue siendo una nación. Verdadero árabe. Si bien la resolución de la crisis con Qatar es bienvenida, los motivos para hacerlo pueden generar más disturbios en el mundo árabe.
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Los oscuros motivos detrás del impulso de Arabia Saudita por la unidad del Golfo
